Un caso real de la ley de la segunda oportunidad

Matrimonio con deudas de tarjetas de crédito e hipoteca. Unos clientes llegaron muy preocupados un día al despacho teniendo entre ambos una deuda imposible de pagar. Debían a Caixabank 295.470 euros por el préstamo hipotecario de su vivienda, otros 35.000 euros por diferentes tarjetas de crédito con Wizink, Caixabank y Bankinter..., más otras deudas derivadas de que uno de ellos era autónomo, entre ellas de 6.000 euros con Hacienda y 20.000 de proveedores.

Les era imposible con sus salarios afrontar las cuotas de las tarjetas, pagar la hipoteca, atender todos los gastos de sus dos hijos, sin riesgo a perder la casa o recibir un embargo de alguna empresa o banco. 

Tras algunos meses de agobio, les tramitamos el procedimiento de la ley de la segunda oportunidad y tras los nervios en la última fase, al solicitar el EPI y demostrar que no existían bienes suficientes para afrontar toda esa la deuda, la satisfacción fue máxima cuando el Juez declaró cancelada toda deuda.

La casa que tenían tenía un valor inferior a la hipoteca, por ello se logró mantener la vivienda sin necesidad de vender o liquidar. Gracias a este paso siguieron pagando las cuotas de la hipoteca, ahora ya más cómodamente al no existir las deudas de las tarjetas y de las empresas al haber sido canceladas por el Juez. 

 

Este es un ejemplo de lo que se puede conseguir acogiéndose a la Ley de la segunda oportunidad.

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